09 mayo 2012

Sensibilidad al Contraste


La sensibilidad al contraste es la capacidad del ojo para distinguir grados sutiles de contraste. Las enfermedades retinianas y del nervio óptico, y la turbidez de los medios oculares puede perturbar esa capacidad.

Como la visión de colores, la sensibilidad al contraste puede alterarse en muchas situaciones antes de que se afecte la agudeza visual (medida con la cartilla de Snellen).

La sensibilidad al contraste suele probarse mediante el empleo de láminas impresas estandar con una serie de blancos de prueba, donde cada blanco consiste en una serie de líneas paralelas oscuras en una de tres orientaciones distintas.

Al reducirse de manera progresiva el contraste entre las líneas y su fondo, de un blanco al siguiente, resulta más difícil para el paciente determinar la orientación de las líneas.

Una persona con sensibilidad al contraste pobre, por cataratas por ejemplo, puede tener una agudeza visual de 20/20, por lo que la cartilla de Snellen para medir la agudeza visual no predice adecuadamente el desempeño visual en la vida diaria.

Referencia